miércoles, 9 de noviembre de 2011

ADVIENTO 2011

El Adviento es el comienzo del Año Litúrgico y empieza un domingo. Adviento viene de adventus, venida, llegada, próximo al 30 de noviembre y termina el 24 de diciembre. Forma una unidad con la Navidad y la Epifanía. El color en la Liturgia en este tiempo es el morado. El sentido del Adviento es avivar en los creyentes la espera del Señor.


El Adviento es un tiempo litúrgico que comienza en el Domingo más cercano a la fiesta de San Andrés Apóstol (30 de Noviembre) y abarca cuatro Domingos. El primer domingo puede adelantarse hasta el 27 de Noviembre, y entonces el Adviento tiene veintiocho días, o retrasarse hasta el 3 de Diciembre, teniendo solo veintiún días.

Con el Adviento comienza el año eclesiástico Durante este tiempo los creyentes son exhortados

  • A prepararse dignamente a celebrar el aniversario de la venida del Señor al mundo como la encarnación del Dios de amor
  • A preparar nuestro espíritu de manera que sus almas sean moradas adecuadas al Redentor que viene en cada eucaristía en cad encuentro de la comunidad
  • A estar preparados para su venida final, Tanto cuando nos llame a su presencia tanto cuando vuelva.

LA corona de adviento

La Corona de Adviento tiene su origen en una tradición pagana europea que consistía en prender velas durante el invierno para representar al fuego del dios sol, para que regresara con su luz y calor durante el invierno. Los primeros misioneros aprovecharon esta tradición para evangelizar a las personas. Partían de sus costumbres para enseñarles la fe católica. La corona está formada por una gran variedad de símbolos:

La forma circular: El círculo no tiene principio ni fin. Es señal del amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe de terminar.

Las ramas verdes: Verde es el color de esperanza y vida, y Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas. El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.

Las velas: Nos hace pensar en la obscuridad provocada por nuestro alejamiento de Dios por la indiferencia que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas la corona. Así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo.

Una vez mas invitamos a vivir el adviento en comunidad animo DIOS ESTA LLEGANDO